Luces desmontables: ¿cómo ahorrar tiempo en la rampa?
Como todos los vehículos de carretera, el remolque está equipado con luces de señalización trasera que indican el frenado, la marcha atrás, el cambio de dirección y, por supuesto, la visibilidad nocturna.
Hasta hace poco tiempo, la mayoría de los remolques porta barco estaban equipados con una placa ligera (de 1,50 a 2,30 m) que se fijaba mediante un sistema de deslizamiento. Y como usted sabe bien, estas placas luminosas pueden ser un verdadero dolor de cabeza a la hora de instalarlas, quitarlas y guardarlas cuando se está en el mar. La manipulación puede ser aún más difícil en una grada húmeda, con algas y en pendiente. Aun menos del hecho de desconectar y volver a conectar el arnés cada vez que se lanza, lo que no es muy aconsejable en un entorno húmedo...
Una vez en el calzo, la luz se torna para que queda paralela al chasis y se desliza hasta el guardabarros. Si su remolque está equipado con el sistema de amarre Quickflex, su luz deslizará hasta el tensor amarillo.
Una vez la luz deslizada, puedes lanzar sur remolque sin sumergirla gracias al sistema de travesaño trasero basculante. ¿Y lo mejor? No has tocado el arnés ni una sola vez. No es necesario desconectar y volver a conectar ya que el conjunto luz + placa permanece en el cuadro.
Este reduce el tiempo de espera de varios minutos, lo cual es muy valioso cuando se tiene prisa por salir al agua.